Importante:
Siempre que tengamos que hacer un cambio en la dieta, debemos hacerlo en forma gradual. Esto es válido en todas las etapas de vida de la mascota.
¿Por qué debo hacer un cambio de alimento en forma gradual?
Los cambios graduales de dieta ayudan a evitar malestares digestivos y el posible rechazo del alimento, que puede darse cuando se cambia bruscamente de dieta.
Estos malestares suelen ocurrir al incorporar un nuevo alimento con una composición de ingredientes distintos a los que viene comiendo y por ello el sistema digestivo tiene que acomodarse y adaptarse a esta nueva situación.
¿Cómo realizar un correcto cambio de alimento en nuestras mascotas?
Los perros y gatos que tienen una dieta y queremos cambiarla por otra nueva, debemos hacerlo con una transición de por lo menos un período de siete a diez días. Por lo que es muy importante tener la cantidad suficiente para estos 7 ó 10 días del alimento actual y del nuevo.
La forma correcta de hacerlo es mezclando gradualmente un pequeño porcentaje del nuevo alimento, al alimento actual (de este último quito el mismo porcentaje que incluí del nuevo). De esta forma voy agregando cada día más cantidad de alimento nuevo y menos cantidad del actual. Así al final de esta transición nuestra mascota estará comiendo solo el alimento nuevo. Y su sistema digestivo se habrá adaptado a la nueva dieta sin consecuencias para las mascotas.
¿Es conveniente cambiar frecuentemente de alimento?
Si bien existen momentos apropiados para cambiar la dieta de una mascota, los cambios frecuentes no son necesarios, ni recomendados. Estos pueden contribuir a la aparición de conductas alimentarias selectivas y aumentar la posibilidad de malestares gastrointestinales. Un ejemplo común es cuando las personas dan alimento balanceado y alternan con dieta casera.